VUELO Y VIENTO
Si miro, cierto, veo las formas tan puras del pájaro, y si escucho, oigo el zumbido de las alas al emprender el vuelo, oigo los trinos, los gorjeos, los gorgoritos, los arrullos, los sonidos agudos y los gritos roncos, en fin la orquesta entera de la celebración del mundo. Sí, no temo escribirlo, más allá de todas las desgracias terrestres, la Tierra sigue siendo un lugar hechizante. Nunca agradeceremos bastante a Carmen Parra darnos la prueba.
VILMA FUENTES